
Estos días los entrenamientos no han ido nada bien, me he sentido bastante fatigada y desganada y las cosas no han salido como deberían, así que he tenido que reducir el ritmo, pero don’t worry.
Aprende a escuchar a tu cuerpo y a darle lo que necesita en cada momento. No lo machaques a conciencia solo por querer estar a un nivel que actualmente, por el motivo que sea, no es posible.
Evita torturarte, castigarte o forzarte, sin duda no son las soluciones más adecuadas.
No es el momento de decaer, tirar la toalla, desanimarse o enrabietarse.
Frena, baja el ritmo siempre y cuando lo necesites, eso no significa que estés retrocediendo o empeorando, significa que eres lo suficientemente inteligente como para seguir avanzando.
A veces también tenemos que permitirnos estar al 50% para volver más fuertes y con más ganas que nunca.
También te puede interesar
0 comentarios